A aspectos en general, el inquilino deberá abonar las pequeñas reparaciones urgentes producidas por el uso ordinario de la vivienda (por servirnos de un ejemplo, cambiar una lámpara o la puerta de un electrodoméstico), siempre y cuando no se intente averías que afecten a la composición de la vivienda o a su habitabilidad. Por otro lado, el propietario será responsable de pagar las reparaciones que sean necesarias para conservar la vivienda en las condiciones de habitabilidad, como por servirnos de un ejemplo, la instalación eléctrica, los techos, o las averías o fallos de los electrodomésticos.

Obligaciones en el contrato de alquiler para el inquilino
O, mucho más últimamente, en 2015, la Audiencia de La capital española resolvió que el lijado y embarnizado de un parqué no podía ser considerado una pequeña reparación pues afectaba a un "elemento sustancial" del inmueble, por más que su desgaste se debiese a su empleo ordinario. El punto 4 del artículo 21 de la LAU establece que "las pequeñas reparaciones que exija el desgaste por el uso ordinario de la vivienda serán de cargo del arrendatario" La jurisprudencia establece que una pequeña reparación es aquella cuyo coste sea inferior a 150 euros. Generalmente, los inquilinos van a ser los responsables de abonar un grifo roto en un piso de alquiler. [newline]Hablamos de desperfectos que brotan como consecuencia del uso habitual y diario de exactamente los mismos y su reparación o sustitución no acostumbra sobrepasan los 150€. Sólo en el caso de que el importe a desembolsar sea mayor va a deber la propiedad asumir su arreglo. La normativa, por tanto, no da una lista cerrada de arreglos que debe asumir uno y otro, o unas cuantías máximas y mínimas, sino utiliza dos términos tan genéricos como "reparaciones necesarias para conservar la vivienda" y "pequeñas reparaciones". Una inconcreción que hace de esta materia un asunto que, frecuentemente, acaba en los tribunales y cuya resolución depende de las situaciones de cada caso. No obstante, la ley no atribuye al casero el deber de costear la solución de todos las imperfecciones.
¿Quién paga una persiana en un piso de alquiler?
De manera afín, si, por servirnos de un ejemplo, un inquilino rompe una mesa de cristal, va a ser su compromiso repararla o comprar una nueva. Sólo será obligación del inquilino arreglar o substituir un sofá en el momento en que los desperfectos se hayan producido a causa de su acción directa. Por ejemplo, hidrojato limpadora E desentupidora Em santos si la existencia de mascotas en el hogar o el hecho de fumar observando la televisión, han derivado en arañazos o quemaduras.
De nuevo, OCU Fincas y Viviendas aclara que si, por poner un ejemplo, hay un defecto intrínseco de la caldera, corresponde al arrendador asumir el coste del arreglo, pero si hay que cambiar unas válvulas por el uso, corresponde al inquilino. Un juez eximió al inquilino de una reparación cuya cuantía equivalía a la mitad de una lavadora novedosa. Eso sí, en estas situaciones, la ley ordena al inquilino a aceptar al casero o a un técnico designado por este "la verificación directa" del estado de la vivienda. El Código Civil declara que el único momento en que el inquilino debería encargarse de aquellas reparaciones urgentes primordiales para preservar las condiciones de habitabilidad de la vivienda es en el momento en que el deterioro sea culpa expresa del inquilino, por mal uso, por negligencia o por daño intencionado.